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En le caso de que se produzca una rotura o una avería, la reparación de puertas de cristal deberá correr a cargo de un fabricante o un instalador autorizado, sobre todo en el caso de piezas de material altamente resistente que no se puedan encontrar con facilidad, como sucede en el caso de las puertas de cristal blindado que se instalan en los bancos y edificios de oficinas en los que se necesita reforzar la seguridad.

Dependiendo de el tipo de cristal del que se fabrican estas puertas habrá que contactar con uno u otro fabricante. Otra cosa diferente es cuando lo que se necesita reparar es el motor o los perfiles metálicos en los que se instalan los cristales, los cuales es mucho más sencillo encontrar aunque como norma general son los mismos los encargados en hacer las reparaciones.

La empresa instaladora de estas puertas suele hacerse cargo también de la reparación y las labores de mantenimiento de estas puertas, y habitualmente no se suele contactar con ningún otro lugar para realizar estos trabajos, sobre todo durante los primeros años.

En el caso de que se busque un precio mejor o la empresa desaparezca por alguna razón, existen otras empresas que pueden reparar estas puertas, aunque siempre es conveniente seleccionar y comparar no solo los precios de los trabajos sino también las condiciones del servicio y las garantías que nos ofrece cada instalador y servicio de mantenimiento para evitar llevarse alguna sorpresa desagradable.

Los motores y sensores de presencia suelen ser las piezas que más fallan, sobre todo en lugares en los que el paso de gente es muy elevado como en centros comerciales, en cuyo caso normalmente se tiene a una persona de mantenimiento permanente que cuenta con los conocimientos mínimos para hacer estas labores.

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