Al igual que ocurre con todas las hojas de las puertas automáticas, las puertas de cristal pueden estar automatizadas, y los motores para puertas de cristal se fabrican pensando en las necesidades específicas que tiene el material con el que estas puertas están hechas.

Estos motores tienen que ser un poco más delicados que con otros modelos, por lo que se fabrican pensando en espacial en las especificaciones concretas que tienen estas hojas, que normalmente son más delicadas que otros materiales, por l oque los motores realizan la labora de abrir y cerrar con un punto más delicado que en otros componentes pero cuidando de que estas labores resulten igual de efectivas que en el resto de las puertas, es decir, que se abran y se cierren con la misma velocidad que con otras puertas automáticas.

¿Cómo es posible conseguir todo esto en un solo motor?

Cuidando muy bien los componentes que acompañan a los mecanismos de este tipo, además de mantener el motor en perfectas condiciones para que todo funcione del modo en el que se espera.

Los motores para puertas de cristal se suelen instalar en la parte superior del conjunto que compone la puerta, posiblemente en un apartado en el que las hojas no se tocan para evitar que las vibraciones del motor puedan afectar de algún modo la estructura del vidrio con el que se fabrican las hojas, pero lo suficientemente cerca como para que este no tenga que trabajar sobrerrevolucionado o forzado, lo que podría provocar un aumento anormal del consumo eléctrico o que se produzcan averías graves que acaben por hacer inservible el motor. También se requiere que el lubricante que lo protege sea transparente o al menos lo más traslúcido posible para evitar que alguna fuga arruine el cristal.