La reparación puertas basculantes de garaje por nosotros mismos puede resultar posible, pero lo mejor y más recomendable es acudir a un profesional que haga el trabajo con las garantías que un elemento de seguridad como este requiere para evitar que un mal funcionamiento pueda dar como resultado una avería mucho mayor o incluso daños a la propiedad y las personas.
Si aún así quieres hacer tú mismo la reparación, hay algunas cosas que debes tener en cuenta.
Si una puerta deja de funcionar en condiciones, no quiere decirse que haya que cambiar la puerta por completa, sino que es mejor hacer una revisión completa de todos los elementos de la puerta para comprobar cuál puede ser el origen del problema.
Si la puerta del garaje está automatizada habrá que hacer algunas comprobaciones en el motor, como asegurarnos de que este tiene corriente y de que los elementos móviles no están trabados pos la acumulación de suciedad o algún elemento que se pueda haber cruzado.
Si después de eso comprobamos que todo está bien, será necesario pasar al modo de apertura y cierre manuales y ver si la puerta se abre o cierra, en cuyo caso y si es posible hacerlo tendremos que adquirir un nuevo motor.
Si la puerta sigue sin abrirse, es posible que los elementos responsables del movimiento basculante, tales como muelles o pesos, se hayan roto, por lo que sería necesario comprobar cuál es el problema y cambiarlos. Estos elementos son sumamente delicados y su instalación es algo complicada, de modo que si no lo ves claro, lo mejor es dejar la reparación en manos de profesionales, que cuentan con al experiencia y las herramientas apropiadas para hacer todo el trabajo con garantías y seguridad, las que tú y tu familia os merecéis.